El cuadro de mando integral, también llamado Balanced Scorecard es una herramienta de gestión empresarial que busca llevar la estrategia a la acción traduciéndola en metas concretas y comunicándola a toda la organización. Éste se conforma de cuatro perspectivas las cuales son: financiera, enfoque al cliente, procesos internos y aprendizaje/crecimiento. En cada una de ellas se encuentran objetivos e indicadores los cuales deben estar relacionados entre sí y alineados a la estrategia empresarial, ordenados en un esquema conocido como el mapa estratégico.
Para este efecto se lleva a cabo el proceso de cascadeo de objetivos con la finalidad de transmitir la estrategia corporativa a cada unidad de negocio y a su vez a cada uno de los miembros de la empresa. A través de este proceso se logra la alineación de los objetivos con las actividades de cada persona y un mejor control del logro y alcance de metas.
Las metas y objetivos de la compañía deberán estar directamente relacionados con la misión y visión de la misma, entendiendo por misión la finalidad para la cual ha sido creada la empresa y la visión la imagen futura de la empresa, es decir la meta a largo plazo. Los objetivos son las metas a alcanzar en un plazo determinado los cuales deben estar en armonía en tiempo y forma con la visión. Por ejemplo, un objetivo de la empresa puede ser lograr el liderazgo de la industria en la región en que se desempeña (largo plazo), mientras que una meta sería incrementar un 30% el nivel de ventas en la región (corto plazo).
Te compartimos 6 consejos para ayudarte a fijar los objetivos estratégicos de tu organización:
1. Establece tus objetivos con base a lo que se espera de la empresa en un futuro (visión).
2. Identifica de manera clara y realista la situación actual de la empresa, realizar un análisis FODA (fuerzas, oportunidades, debilidades y amenazas) puede ser de gran utilidad.
3. Fija objetivos con una perspectiva realista.
4. Determina tus objetivos de manera que sean medibles.
5. Define periodos específicos para cada uno de los objetivos.
6. Segmenta el objetivo en pequeños objetivos de manera que sean más claros.
En el artículo “10 claves para una implementación exitosa del Balanced Scorecard” te comentamos que el cascadeo de objetivos es el proceso que se refiere a asignar los objetivos al siguiente nivel jerárquico de tal manera que el director asigne a cada uno de los gerentes los objetivos y metas que les corresponden según su área de operación, por ejemplo al gerente comercial se le asignan o cascadean los objetivos que pertenecen al departamento de venta, y por consiguiente éstos realicen el mismo proceso con el equipo de trabajo que tienen a cargo.
Este proceso tiene algunos retos que superar, pero los beneficios que se obtienen de alinear los esfuerzos individuales a las prioridades organizacionales son claros, algunos de ellos son:
• Enfocar al equipo en las metas prioritarias para la empresa.
• Fomentar la motivación y compromiso del equipo de trabajo.
• Definir de manera transparente y medible la responsabilidad de cada empleado en la consecución de los objetivos.
• Reducir la incertidumbre al comunicar de manera clara y asequible las metas a cada miembro de la organización.
• Transmitir a los colaboradores la importancia de su trabajo al aportar valor al logro de las metas estratégicas.
Es importante que la iniciativa del cascadeo de objetivos tenga su origen en la alta dirección de la empresa, que los directores estén involucrados y a través de su liderazgo puedan transmitir la importancia de esta práctica. Esto reflejará que la misión, visión y valores de la empresa están alineados a los esfuerzos departamentales e individuales con el fin de lograr el éxito de la organización.
Para hacer más efectivo este proceso es recomendable que te apoyes en herramientas que ya han sido probadas por empresas de éxito como el Balanced Scorecard gracias al cual lograrás un equilibrio en las diferentes metas de la empresa no solamente a nivel financiero sino cubriendo las perspectivas de enfoque a clientes, procesos y el aprendizaje de tu equipo de trabajo.
Integrar el proceso de cascadeo como parte de la comunicación organizacional debe ser una práctica que se lleve a cabo de manera establecida y formal a lo largo de la empresa, esto permitirá la alineación de objetivos individuales hacia las metas prioritarias.
Es importante incluirlo como parte de la gestión de talento humano en tu compañía de tal manera que se vuelva parte de la cultura organizacional, esto fomentará una mejor comunicación entre los diferentes niveles jerárquicos.
Cuando realices el cascadeo de objetivos al siguiente nivel es importante que lo hagas teniendo en cuenta el perfil de puesto de la persona, es decir las actividades que acorde a éste le corresponden y de las cuáles es responsable para que las metas y objetivos determinados para el colaborador estén alineadas a las tareas que realiza. De esta manera estarás asegurándote que los esfuerzos que está llevando a cabo están encaminados al logro de las metas adecuadas y que la persona se sentirá motivada al desempeñar su puesto de trabajo ya que sabe el valor que aporta a la organización.
Un factor clave para lograr la efectividad de este proceso es que el personal a cargo esté capacitado. Es importante que tu equipo conozca métodos para establecer las metas de manera correcta, un método recomendado por los expertos es el llamado SMART en el cual se propone que las metas sean: Específicas (Specific), Medibles (Measurable), Alcanzables (Achievable), Relevantes (Relevant) y Calendarizadas (Timed).
Asegúrate de que cada persona en la estructura organizacional conozca bien el proceso para que éste pueda ser llevado a cabo de manera fluida, organizada y efectiva.
Para tus colaboradores es importante conocer cómo sus metas personales aportan a los objetivos organizacionales, cuando ellos entienden de qué manera cada una de las actividades que realizan contribuyen al éxito de la empresa obtienen la motivación hacerse responsables de su puesto, tomar decisiones y trabajar para alcanzar sus metas.
Además, involucrar al equipo en la definición de metas te puede dar un panorama más claro y realista ya que ellos son los que están en el día a día de las operaciones de la empresa y de las tareas pertenecientes a su puesto de trabajo.
Si bien es cierto que el establecimiento de metas y cascadeo debe ser llevado a cabo como parte de la planeación estratégica es importante no perder de vista que durante las revisiones periódicas es totalmente válido hacer un reajuste de las metas y objetivos de acuerdo a la situación de la empresa o a factores externos que no hayan sido contemplados. Esto te permitirá tomar mejores y más oportunas decisiones.
Alinear los esfuerzos de tus colaboradores a los objetivos estratégicos de tu compañía te permitirá empoderarlos de manera que conozcan el valor que aportan a la empresa con el cumplimiento de sus metas específicas. Al hacer partícipes a tus empleados de la estrategia organizacional, creas una línea de comunicación clara y efectiva para tus empleados por lo que estarán más conectados y comprometidos con su trabajo al conocer como su contribución se relaciona con el fin principal que es el crecimiento de ellos como profesionales y así como de la empresa.
Implementar la metodología Balanced Scorecard será de gran utilidad para que realices el cascadeo de objetivos de manera más efectiva. Apóyate en el Software para Capital Humano SuccessFactors con el cual por medio de su módulo de Administración por Objetivos y Balanced Scorecard te ayudará a alinear los objetivos estratégicos con el desempeño del talento humano para lograr el crecimiento de la empresa.
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Oscar Pérez | Director General PeopleNext